martes, 31 de julio de 2012


Parecerá una tontería, pero no es así, no lo es. No puedes cambiarlo ni siquiera TÚ que eres dueña de ti y de tus sentimientos, los mismos que te han llevado a él y que por cualquier razón, ahora, no puedes evitar mirarle cada vez que sabes que esta a tu lado, no sonreir al escuchar su nombre, no alegrarte al oír su voz, no saltar de emoción cuando parece que te mira, no liarte con las palabras cuando pasas delante suya, no sentir envidia de la persona que en ese momento está a su lado y le habla como si nada… No, no puedes ni evitarlo ni cambiarlo, porque aunque creas que eso es lo quieres, en realidad deseas que te dirija la palabra aunque sea para decirte adiós, que sepa que existes, que eres la idiota que, al fin y al cabo, solo pides una mirada, su mirada. Es así, le quieres.

viernes, 27 de julio de 2012


Antes creía que sabía vivir, pero ahora me he dado cuenta de que eso no era vida, de que esa no era yo, de que no estaba completa. Por eso puedo decir, que mi vida empezó cuando, en vez de ser tú, y yo, nos convertimos en un nosotros

martes, 24 de julio de 2012

Es increíble lo poco conscientes que somos día a día de como cambia la vida, y lo sorprendidos que nos quedamos cuando al mirar al pasado, descubrimos que nada es como era antes. Parece inevitable que la vida siga su curso entre etapas pasadas y nuevos retos, resulta difícil controlar cómo seremos en un mes, en un año, en un periodo de tiempo incierto. Y es ahí donde aparece el lado azaroso del destino. No sabemos lo que nos depara el futuro, personalmente, no sé si llegaré a ser lo que quiero ser, no sé en qué circunstancias viviré. No podemos elegir cómo va a ser nuestro futuro de un modo seguro, y tampoco podemos tener la certeza de que tendremos a nuestro lado a quien nosotros elijamos. Todo se reduce a querer, pero ello no implica que vaya a cumplirse.
Es increíble cómo crecemos y maduramos. Es increíble cómo personas llegan a nuestras vidas un día cualquiera, como un doce de Marzo o un 14 de Mayo, y nos la cambian, e incluso es increíble como personas que ya estaban en tu vida ejerciendo un papel secundario acaban siendo los coprotagonistas de la tuya, sin que tú te des cuenta del proceso

domingo, 15 de julio de 2012


Tiene un problema tremendo con el futuro. No le gusta tener que tomar decisiones que tengan repercusiones a la larga, no le gusta pensar más allá de lo que tiene que hacer el fin de semana, detesta que sus actos en el presente sean los que vayan a determinar su vida en un periodo de tiempo incierto. Tiene un problema con el futuro, y es que, si por ella fuera, se quedaría estancada en el presente, que es donde se siente más segura, más "ella", en ese en el que sólo tiene ganas de reir a carcajadas. Se siente vulnerable, frágil, ante todas las posibilidades que la vida, tan caprichosa, puede poner en su camino.
Tiene un problema enorme con el futuro, porque ha escuchado tantas veces eso de que lo que la vida te da, también te lo quita, que le aterra el hecho de quizá él no esté a su lado

Me vas a tener que perdonar, pero me importa muy poco lo que te pongas si luego te lo voy a quitar. En esta habitación me sobra de todo menos tú. Así que deshazte de todas las cosas que tengas, y tíralas donde no pueda verlas. A ti no sé, pero a mi suelo le combina de puta madre el color azul de tu camiseta.
Es la última vez que te lo digo, o te entregas o te desarmo ahora mismo. No sé si sabrás de verbos, pero voy a conjugar mi lengua con la tuya en todos los tiempos. De ninguna de las maneras des marcha atrás. No justo cuando acabas de sacarte el permiso de conducir tus manos por mi cuerpo.


Me vas a tener que perdonar, pero no seguiré ningún código, y menos de conducta. Lo único que vas a poder cambiar de mi próximo movimiento es el ritmo y la temperatura.